La escritora retrata una época de crisis económica en París del año 1934 donde era una suerte tener y no perder un empleo. Christophe Bohum es el hijo de James Bohum, quien fuera un industrial poderoso. En una maniobra arriesgada perdió el control de su fábrica y que ahora controla su socio, que es donde trabaja Christophe. Su vida es la de un empleado sin ambiciones y sobrevive gracias al aporte adicional que realiza cada mes su padre. Nadie sabe cuál es el patrimonio de su padre y qué ocurrirá cuando este muera. Cuando ello ocurre no hay patrimonio con el cual seguir existiendo, solo hay una lista de dinero que en su momento James uso para sobornar, y que bien usado haciendo chantaje a los susodichos podría sacarlo adelante. Pero ¿es él capaz de semejante cosa? Intensa y vibrante esta novela explora el complejo vínculo de un hijo con su padre y el laberinto en que se encuentra.